Mejora tu consumo
15/04/2015
English Scuba Rangers
01/06/2015
Mostrar todo

Freediving. Descúbrete!

FOTO: Práctica del curso SSI Freediving Level 1-2

 

Te has preguntado alguna vez ¿Qué piensan los peces cuando nos ven bajo el agua? ¿Quién son estos extraños que nos visitan?

Ellos también sienten esa curiosidad, es cierto que su primera reacción es protegerse de lo desconocido, pero cuando se sienten seguros empiezan a investigar, a acercarse. Para eso es necesario no hacer ruido ni movimientos bruscos, en definitiva, moverse como pez en el agua.

El buceo con equipo autónomo nos permite permanecer bajo el agua por largos periodos de tiempo y observar con detenimiento el entorno e incluso el comportamiento de las diferentes especies que pueblan el mar.

Aun así existe otra manera de ser menos intrusivo, de pasar más desapercibido, sumergirse únicamente con la ayuda de nuestros pulmones. Es una sensación extraordinaria la que se experimenta cuando un pez de gran tamaño como un pez napoleón o incluso una raya de 4 metros de envergadura se dirige hacia ti para reconocerte, observarte de cerca y se cruza tu mirada con la suya. Incluso las tortugas marinas llegan a acercarse para tocarte con sus aletas y enseñarte lo que significa realmente hacer apnea.

Es difícil describir la paz que se consigue cuando somos capaces de ese autocontrol que nos permite evadirnos completamente del exterior y focalizar toda nuestra atención en nosotros mismos, en el momento presente, en cada segundo que transcurre mientras aguantamos la respiración para deslizarnos en un medio que cada vez nos resulta menos extraño y hostil.

Mucho más allá de permitirnos visitar los mares del mundo, además de los ríos y lagos, nos llevará a un viaje interior muchísimo más interesante. Alguien dijo una vez aquello de: “The scuba diver dives to look around, the freediver dives to look within”

Hoy en día que todos corremos de un lado para otro sin un minuto para dedicarnos a nosotros mismos podemos encontrar un oasis de tranquilidad en la práctica de este deporte. Además de romper esa barrera física que es la superficie del agua cuando nos sumergimos, traspasamos una barrera psicológica, al centrar toda la atención en las reacciones de nuestro cuerpo ante tan extraña decisión de aguantar la respiración por más de tres segundos. Con unos conocimientos básicos de las respuestas fisiológicas de nuestro cuerpo y algo de práctica conseguiremos superar horizontes que creíamos reservados simplemente a unos pocos.

La apnea no es solo un deporte o simplemente un pasatiempo, puede convertirse en una forma de vida, en una manera de superar adversidades y de descubrir realmente de lo que somos capaces si conseguimos el control de nuestro propio cuerpo. No pienses que para practicar apnea es necesario desplazarse a un lugar tropical con mares cálidos, es algo que puedes practicar en cualquier sitio, incluso en la piscina de tu ciudad.

Dedícale unos minutos a establecer un vínculo más fuerte entre tu cuerpo y tu mente y te sorprenderá hasta dónde eres capaz de llegar.

Javier Porras
Artquatic – SSI Freediving Instructor